En 1926, Heraldo de Madrid organizó una exposición de jóvenes pintores catalanes, entre ellos, Salvador Dalí. La crítica que le hizo Cipriano Rivas Cherif en portada marcó el destino del joven pintor.
En 1926, Heraldo de Madrid organizó una exposición de jóvenes pintores catalanes, entre ellos, Salvador Dalí. La crítica que le hizo Cipriano Rivas Cherif en portada marcó el destino del joven pintor.