Categoría: Investigación

Propaganda de la II Guerra Mundial en la España de Franco

Dr. Antonio César Moreno Cantano

Durante la Guerra Civil española se produjeron los primeros ataques aéreos de la historia sobre población civil. Nefastas consecuencias tuvo, a nivel internacional, para el bando franquista acciones de castigo como las de la Legión Cóndor en Guernica, que fueron denunciadas a nivel periodístico por numerosos periodistas y corresponsales extranjeros.

De cómo los nazis odiaban a los soviéticos

Antonio César Moreno Cantano*

A raíz de la “Operación Barbarroja” (calificada por el mariscal Antonescu como una guerra santa) se desplegó por toda la Europa del Eje una auténtica corriente de odio contra el vecino ruso. Expresado el mismo de multitud de formas, uno de los aspectos más llamativos y atractivos para las masas fue el que se plasmó a través de grandes exposiciones internacionales, que recurriendo al arte (pabellones fotográficos, murales, carteles, esculturas, pinturas) y la propaganda crearon un prototipo del enemigo totalmente despreciable para los ciudadanos germanos, franceses o españoles.

Exilio, represión y expolio económico

Gil Toll

Los primeros exilios de la gente de Heraldo de Madrid llegan en 1937. El director histórico, Manuel Fontdevila, se instala en París, acompañado del jefe de redacción, Alfredo Muñiz. Allí coinciden con otros periodistas destacados, como Manuel Chaves Nogales, que tras su paso por Heraldo de Madrid había ocupado la subdirección de Ahora.

Un periódico en guerra

Gil Toll

En la mañana del 28 de marzo, la redacción de Heraldo de Madrid permanecía en silencio. La radio encendida transmitía música militar como banda sonora del avance de las tropas franquistas por el extrarradio en dirección al centro de la ciudad. En la sala de redacción estaba el director de los últimos tiempos, Federico de la Morena, los redactores Enrique Ruiz de la Serna, Juan Antonio Cabero, Eduardo de Castro, Antonio Uriel y Diego San José. También estaban el caricaturista Sama y el fotógrafo José María Díaz Casariego.